viernes, 22 de febrero de 2008

Cómo saber cuándo actuar y cuándo no; cuándo apartarte de una situación o cuándo involucrarse. Es difícil. Es dificil tomar decisiones cuando alguien está por medio. Es difícil tomar la decisión de decirle a alguien que se equivoca.
Cómo saber si necesita su tiempo, o si necesita que estés ahí para que no se sienta sóla. ¿Quién lo sabe? No sé si decirte lo que pienso; mientras, pensaré lo que te diria.
La mitad de las veces, no te gusta, y ni siquiera sé si te ayuda, pero créeme, lo hago con la mejor intención. Más no puedo hacer.
Tengo miedo, tengo miedo de que te equivoques y de que te sientas sola, pues no lo estás. No puedes atreverte a todo sin cautela, vive, pero siempre consciente.
No quiero decir que no arriesgues, muchas veces es motivo de logro. Pero que en todo momento seas tú. No evadas sin razón: es lo peor.
No se si realmente estás mal, te veo, pero no lo sé. Me falta que me lo digas y que me pidas un abrazo. Ya hace falta, mucha falta.
Quiero que seas feliz, feliz con tu vida, feliz en tu vida. Busca la felicidad en las cosas pequeñas, busca cosas que te hagan sentirte bien, pero no lo hagas por olvidar otras. Ese es el miedo que tengo, que empieces de cero por el sólo hecho que querer olvidar o de intentar tener algo nuevo en tu vida que te aparte de tu mundo durante unas horas. Tengo miedo de que, lo hagas y te des cuenta de que, no sirve para nada. A lo mejor me equivoco, pero por favor: ten cuidado.
Cuida tu corazón, cuidate tú. No siempre puedo cuidarte, aunque lo quiera, aunque quiera tenerte en la "cupulita"... debo dejarte tu espacio. Me lo estás pidiendo a gritos, lo oigo.
Cuando vuelvas a necesitar un abrazo, de esos sin preguntas, de esos en los que el tiempo se para para echar todo lo que tienes dentro sin que te pregunte por qué, estaré aquí.

No hay comentarios: